
Me muero de la pena. Tus fotos, tu flickr, tu tumblr, tus pensamientos más profundos, tus secretos, los que solo nosotros dos sabemos, todo, todo.
Las caminatas por el borde costero, las tallas comiendo en el Bravissimo, los trámites en Valpo, el almuerzo en Bellavista, las fotos en la playa.


No soporto pensar que no te voy a ver nunca más.

Me extraña pensar que nunca me vas a responder el whatsapp que te escribí.
Me extraña que ya no estás, y estas cosas no se superan.
El mundo no para, tengo que seguir y me produce angustia mi incredulidad.
Estas cosas son fáciles si tienes tu religión, yo no, para mi la muerte es el final. Y tu no te merecías un final así, ni ahora.
Te extraño tanto, ya no quiero llorar más pero no puedo.